Lo último de la nueva guerra fría

 

Por Mike Whitney*
Traducido por Enrique Prudencio para Zona Izquierda


"La historia demuestra que Estados Unidos se ha beneficiado política y económicamente de las guerras que han tenido lugar en Europa. La enorme salida de capitales de Europa después de la Primera y Segunda Guerras Mundiales, transformaron EEUU en una superpotencia. Hoy, ante su declive económico, EEUU está tratando de precipitar una nueva guerra europea para lograr el mismo objetivo”.

Sergey Glaziev, político y economista ruso: "El descubrimiento de las más grandes reservas de gas conocidas del mundo, situadas en el Golfo Pérsico, compartido por Qatar e Irán, y la nueva evaluación que estima en un 70% más el gas en el Levante de lo que se creía en 2007, son la clave para entender la dinámica de los conflictos que vemos hoy. Después de la finalización del gasoducto PARS, de Irán, que corre a través de Irak y Siria, hasta la costa del Mediterráneo Oriental, la Unión Europea recibirá más de un 45 por ciento del gas que consuma en los próximos 100 a 120 años procedentes de fuentes rusas e iraníes. En tiempos en que no haya conflictos, forzaría a una mayor integración de los sectores de la energía europeos, rusos e iraníes y sus economías nacionales".

         
Christof Lehmann, entrevista con la revista Ruta: El fracaso de Estados Unidos en el patrocinio de su agresión delegada en los terroristas de las mil y una franquicias de Al Qaeda en Siria, ha llevado a una intensificación de la lucha de poder de Washington en Ucrania. Lo que EEUU esperaba lograr en Siria mediante su total e incondicional apoyo a los llamados militantes islámicos "moderados", era derrocar el régimen de Bashar al Assad, reemplazarlo por un gobierno títere bajo el patrocinio de Estados Unidos, y evitar la construcción del crítico gasoducto Irán-Irak- a través de Siria. Ese plan no ha tenido éxito ni lo tendrá en un futuro próximo, lo que significa que el objetivo del gasoducto proyectado finalmente no saldrá adelante.

¿Por qué esto es un problema?

Es un problema porque según el Dr. Lehmann "Junto con el gas ruso ... la UE sería capaz de cubrir un 50 por ciento de sus necesidades de gas natural a través de fuentes iraníes y rusas." Como los principales proveedores de recursos críticos de Europa - Moscú y Teherán - alcanzarían pronto un fuerte desarrollo económico y una posición política más prominente, que socavaría significativamente la influencia de EEUU y sus aliados en la región, especialmente en Qatar e Israel. Es por esto que quienes se oponen al gasoducto desarrollaron su plan para sabotear el proyecto fomentando una guerra civil en Siria. Aquí está de nuevo Lehmann:

          "En 2007, Qatar envió 10 mil millones de dólares al canciller turco Davotoglu con el fin de preparar a la Hermandad Musulmana de Turquía y Siria para la subversión en Siria. Como hemos podido constatar con el ex ministro de Relaciones Exteriores francés, Dumas, fue también en esa época, cuando los dirigentes del Reino Unido comenzaron a planificar la subversión de Siria con la ayuda de unos "rebeldes". (Christof Lehmann, entrevista con la revista Ruta).

 

En otras palabras, la idea de armar, entrenar y financiar un ejército de militantes yihadistas, para derrocar al Assad y abrir Siria a los intereses occidentales, tuvo su origen en una imagen de energía en evolución que claramente se inclinados a favor de los rivales de EEUU en la región. (Nota: No estamos seguros de por qué Lehmann deja fuera a Arabia Saudita, Kuwait o los otros Estados del Golfo, que también están implicados.)

La tesis de Lehmann es apoyada por otros analistas, entre ellos Ahmed Nafeez de The Guardian, que explica lo que estaba pasando detrás de las escenas del falso levantamiento civil en Siria. Esta es una cita de un artículo de Ahmed titulado "el plan de intervención en Siria está alimentado por los intereses petroleros, no por la preocupación de las arma químicas".

          "En mayo de 2007, una orden presidencial reveló que Bush había autorizado operaciones de la CIA contra Irán. Las operaciones anti-Siria también estaban en pleno apogeo en esta época como parte de este programa encubierto, según Seymour Hersh en el New Yorker. Una amplia gama de fuentes gubernamentales y de inteligencia de Estados Unidos dijeron que el gobierno de Bush había "cooperado con el gobierno de Arabia Saudita, que es sunita, en operaciones clandestinas" destinadas a debilitar al chiíta Hezbollah en el Líbano. "Estados Unidos también ha tomado parte en operaciones clandestinas en Irán y su aliado Siria", escribió Hersh, "un subproducto" del refuerzo de los grupos extremistas sunitas" hostiles a los Estados Unidos y "simpatizantes de al-Qaeda. Señaló que “el gobierno saudí, con la aprobación de Washington, proporcionaría fondos y ayuda logística para debilitar al gobierno del presidente Bashir Assad, de Siria "...

          Según el ex ministro de Relaciones Exteriores francés Roland Dumas, Gran Bretaña había planeado acciones encubiertas en Siria ya en 2009: "Yo estuve en Inglaterra dos años antes del comienzo de la violencia en Siria por otros asuntos", dijo a la televisión francesa:

          "Me reuní con altos funcionarios británicos, que me confesaron que estaban preparando algo en Siria. Esto fue en Gran Bretaña no en América. Gran Bretaña preparaba pistoleros para invadir Siria"... correos electrónicos filtrados de la empresa privada de inteligencia Stratfor, incluyendo notas de una reunión con funcionarios del Pentágono, confirmaron la información de Estados Unidos-Reino Unido según las cuales las fuerzas de la oposición siria llevaban desde 2011 dedicadas a provocar el "colapso" del régimen de Assad "desde dentro".

          Entonces, ¿qué estrategia era esa que había que desarrollar para socavar a Siria e Irán y todo eso? Según el exsecretario General de la OTAN Wesley Clark, una nota de la Oficina del Secretario de Defensa de EEUU tan sólo unas semanas después del 9/11 reveló los planes para "atacar y destruir a los gobiernos de 7 países en cinco años», empezando por Irak y siguiendo con "Siria, Líbano, Libia, Somalia, Sudán e Irán." En una entrevista posterior, Clark sostiene que “esta estrategia se basa fundamentalmente en el control de los vastos recursos de petróleo y gas de la región". ("El plan de intervención en Siria estaba alimentado por los intereses petroleros, no por las preocupaciones por las armas químicas ", The Guardian).

Al parecer, Assad fue abordado por Qatar sobre el tema del oleoducto en 2009, pero él se negó a cooperar con el fin de "proteger los intereses de [su] aliado Rusia." Assad había caído en esta línea y estaba de acuerdo con la oferta de Qatar y entonces el esfuerzo para que abandonara su carago probablemente habría sido cancelado. En cualquier caso, fueron los acontecimientos en Siria los que provocaron la reacción frenética en Ucrania. Según Lehmann:

          "La guerra en Ucrania se convirtió en predecible (¿inevitable?) Cuando el gran proyecto de la Hermandad Musulmana en Siria falló durante el verano de 2012 ... En junio y julio 2012 unos 20.000 mercenarios de la OTAN que habían sido reclutados y entrenados en Libia, en la ciudad fronteriza de Al-Mafraq, lanzaron dos campañas masivas dirigidas a apoderarse de la ciudad siria de Aleppo. Ambas campañas fracasaron y la "Brigada de Libia" fue literalmente aniquilada por el Ejército Árabe de Siria.

          Fue después de esta derrota decisiva cuando Arabia Saudita comenzó una campaña masiva para el reclutamiento de combatientes yihadistas a través de la red de la hermana gemela musulmana de las cofradías de Al qaeda.

          El Grupo Internacional de Crisis respondió con la publicación de su informe "provisional de la Jihad". Washington tuvo que hacer un intento de distanciarse "políticamente" de los "extremistas". El plan B, el de las armas químicas, fue llevado a cabo, pero se hizo evidente que la guerra en Siria no se podía ganar. ("El Eje Atlántico y la fabricación de una guerra en Ucrania ", Nueva Perspectiva Oriental).

Hubo otros factores que empujaron a EEUU hacia una conflagración con Moscú en Ucrania, pero la fuerza impulsora principal fue el hecho de que los rivales de Estados Unidos (Rusia e Irán) se habían convertido en los jugadores dominantes en una guerra por las fuentes energéticas que erosionaría cada vez más el poder de Washington. Una mayor integración económica entre Europa y Rusia representa una amenaza directa a los planes estadounidenses de controlar Asia, desplegar la OTAN hasta las fronteras de Rusia, y continuar hasta conseguir que el tráfico de los suministros energéticos mundiales se negocie en dólares estadounidenses.

Lehmann señala que tuvo una conversación con "un almirante-top de la OTAN de un país del norte de Europa", quien explicó la situación en un lacónico resumen de dos frases de la política exterior estadounidense. Dijo:

          "Colegas estadounidenses del Pentágono me han dicho, de manera inequívoca, que EEUU y Reino Unido nunca permitirán que las relaciones “Euro-soviéticas” se desarrollen hasta tal punto que puedan llegar a desafiar la primacía política, económica o militar, en suma, la hegemonía de EEUU / Reino Unido en el continente europeo. Tal desarrollo se evitaría por todos los medios necesarios, incluyendo una guerra en el centro de Europa".

Este es el quid de la cuestión. Estados Unidos no va a permitir que ningún estado o alianza de estados desafíen su dominio. Washington no quiere rivales. Quiere ser la superpotencia mundial indiscutible, según lo expone Paul Wolfowitz en un primer borrador de la “Estrategia Nacional de Defensa de Estados Unidos:

          "Nuestro primer objetivo es prevenir el resurgimiento de un nuevo rival, ya sea en el territorio de la antigua Unión Soviética o en otro lugar, que represente una amenaza del tipo de la planteada anteriormente por la Unión Soviética. Esta es una consideración dominante subyacente a la nueva estrategia de defensa regional y requiere que nos esforzamos para evitar que cualquier potencia hostil domine una región cuyos recursos, bajo un control consolidado, resultan suficientes para generar energía para todo el mundo".

Así que la administración Obama va a hacer lo que crea necesario para detener una mayor integración económica entre la UE y Rusia y para preservar el sistema del petrodólar. Ese sistema se originó en 1974 cuando el presidente Richard Nixon convenció a los miembros de la OPEP para transar su petróleo exclusivamente en dólares, y para reciclar los excedentes de los ingresos petroleros en bonos del Tesoro. La disposición resultó ser un gran golpe de mano de EEUU, que recauda más de mil millones de dólares diarios a través del proceso. Esto, a su vez, permite a EEUU consumir en exceso y tener déficits fuertes. Otras naciones deben acumular dólares para comprar la energía que mueve su maquinaria, calienta sus hogares y mueve sus vehículos. Mientras tanto, EEUU pueden intercambiar alegremente el papel moneda que puede imprimir sin costo para sí mismo, por valiosos bienes importados que cuestan muy caros en términos de mano de obra y materiales. Estos dólares luego se usan en la compra del petróleo o el gas natural, cuyas ganancias son recicladas de nuevo en otros activos en dólares estadounidenses como acciones, bonos, bienes raíces. Este es el círculo virtuoso que permite la hegemonía universal de EEUU.

Como dijo un crítico: "El comercio mundial es ahora un juego en el que EEUU fabrica dólares y el resto del mundo produce las cosas que el dinero puede comprar."

El sistema del petrodólar ayuda a mantener los precios de monopolio del dólar que, a su vez, sostiene a este como moneda de reserva mundial. Se crea la demanda excesiva de dólares que permite a la Fed expandir el crédito de la nación al reducir drásticamente el coste de la financiación. Si el petróleo y el gas natural dejan de utilizar el dólar como divisa de reserva, su valor caería bruscamente, el mercado de bonos se vendría abajo, y la economía de Estados Unidos podría caer en una gran depresión a largo plazo.

Esta es una de las razones por las que EEUU invadieron Irak poco después de que Saddam hubiera cambiara del dólar al euro: porque considera cualquier desafío a la estafa y el saqueo del petrodólar como una amenaza directa a la seguridad nacional.

Moscú es consciente del talón de Aquiles de Washington y está haciendo todo lo posible para explotar esa debilidad mediante la reducción del uso del dólar en sus acuerdos comerciales. Hasta ahora, Moscú ha persuadido a China e Irán para que abandonen el dólar en sus relaciones bilaterales, y ha encontrado que los otros socios comerciales están dispuestos a hacer lo mismo. Recientemente, los ministros de economía de Rusia llevaron a cabo una reunión de "desdolarización" en la que fue emitida "la orden ejecutiva de cambiar la moneda de reserva", declarando que "el gobierno tiene el poder legal para obligar a las empresas rusas a negociar un porcentaje de determinadas mercancías de rublos".

La semana pasada, de acuerdo con RT:

          "Los bancos centrales de Rusia y China han acordado un contrato de proyecto swap de divisas, lo que les permitirá aumentar el comercio en monedas nacionales y evitar la dependencia del dólar estadounidense en los pagos bilaterales. "El proyecto de documento entre el Banco Central de Rusia y el Banco Popular de China sobre los swaps de monedas nacionales ha sido acordado por las partes. El acuerdo impulsará el desarrollo del comercio directo en yuanes y rublos en los mercados de divisas nacionales de Rusia y China ", dijo el regulador ruso.

          Actualmente, más del 75 por ciento de los pagos en las operaciones comerciales de Rusia y China se hacen en dólares estadounidenses, según el diario Rossiyskaya Gazeta "(se acelera la desdolarización”: China / Rusia completan el cambio de moneda de reserva ", Zero Hedge).

El ataque contra el sistema de reciclaje de petrodólares es una de las muchas estrategias asimétricas. Moscú está actualmente maniobrando para desalentar la agresión estadounidense, para defender su soberanía, y para promover un orden mundial multipolar, donde prevalezca el estado de derecho mundial. El Kremlin también está presionando para que los cambios institucionales ayuden a nivelar el campo de juego en lugar de crear un desequilibrio injusto a favor de los países más ricos como EEUU Naturalmente, en sustitución del FMI, cuyos préstamos y políticas punitivas de explotación de los países encabezó la lista de la mayoría de las naciones de mercados emergentes, en particular de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) que, en julio, acordaron la creación de un Banco de Desarrollo dotado con $ 100 000 000 000 que "va a contrarrestar la influencia de las instituciones de crédito con sede en Occidente y al dólar. El nuevo banco ofrecerá dinero para proyectos de infraestructura y desarrollo en los países del BRICS, y a diferencia del FMI y el Banco Mundial cada nación tiene el mismo trato, independientemente del tamaño de su PIB.

Según RT:

          "El gran lanzamiento del banco BRICS es visto como un primer paso para romper el dominio del dólar estadounidense en el comercio mundial, así como la alternativa a las instituciones respaldadas por el dólar, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, instituciones que tienen poca influencia en los países Brics"...

          "Este mecanismo crea las bases para una efectiva protección de nuestras economías nacionales cuando se produzca una crisis en los mercados financieros", dijo el presidente ruso, Vladimir Putin. "BRICS establece un banco dotado con $ 100 mil millones y la canasta de monedas para acabar con el dominio occidental", RT.

Es claro que la agresión de Washington en Ucrania ha centrado la atención de Moscú en lo que es una flagrante represalia. Pero en lugar de enfrentarse militarmente a EEUU, como la actitud de Obama y Co. muestra flagrantemente, Putin está apuntando el tiro a las vulnerabilidades del sistema en sí. Un Banco de Desarrollo BRICS desafía el papel dominante del FMI como prestamista de última instancia, un papel que ha mejorado el poder de los países ricos y sus industrias, mientras perjudicaba a los países menos desarrollados. El nuevo banco crea la base para el cambio institucional real, aunque, todavía dentro del marco capitalista dominante.

El político y economista ruso Sergei Glaziev resume el enfoque de Moscú respecto a la conflagración entre Estados Unidos y Rusia en un ensayo titulado "Estados Unidos está militarizando Ucrania para invadir Rusia." He aquí un extracto:

          "Para detener la guerra, es necesario poner fin a sus fuerzas motrices. En esta etapa, la guerra se desarrolla principalmente en los planos de las relaciones y las políticas económicas públicas. Todo el poder de la superioridad económica se basa en la pirámide financiera de la deuda, que ha ido mucho más allá de la sostenibilidad. Sus principales prestamistas la están colapsando lo suficiente para privar al mercado de los EEUU de dólares estadounidenses acumulados y bonos del Tesoro. Por supuesto, el colapso del sistema financiero de Estados Unidos causará graves pérdidas a todos los tenedores de moneda y valores de EEUU Pero en primer lugar, estas pérdidas serán mucho menores para Rusia, Europa y China que las que produciría una nueva guerra mundial a la que nos lleva la geopolítica estadounidense. En segundo lugar, cuanto antes se salga de las obligaciones financieras de esta pirámide americana, menores serán las pérdidas. En tercer lugar, el colapso del esquema Ponzi del dólar da una oportunidad, por fin, para reformar el sistema financiero global sobre la base de la equidad y el beneficio mutuo".

Washington cree que "la guerra moderna" implica un apoyo encubierto a los ejércitos constituidos por neonazis y extremistas islámicos, reclutados y financiados por “apoderados” o patrocinadores extranjeros. Moscú cree que la guerra se puede evitar socavando la capacidad económica de su enemigo mediante el ataque a su moneda, sus instituciones, su mercado de bonos, y su capacidad para convencer a sus aliados de que es un administrador responsable del sistema económico global.

Voy a poner mi dinero en Rusia.

 


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MIKE WHITNEY vive en el estado de Washington. Es colaborador de Hopeless: Barack Obama y la política de la Illusion (AK Press).

 

Fuente: http://www.counterpunch.org/2014/08/12/my-moneys-on-putin/print

  

 

 

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